La incidencia del sector público sobre la desigualdad de los hogares

En este post se muestran los principales resultados del Sexto Informe del “Observatorio sobre el reparto de los impuestos y las prestaciones entre los hogares españoles”, en el que se estima, para los años 2017 y 2018, el impacto distributivo sobre los hogares residentes en España de las prestaciones públicas monetarias y en especie y el sistema fiscal. El estudio abarca a los residentes en las diecisiete comunidades autónomas y en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla. En resumen, la intervención pública corrige la desigualdad de la renta de mercado de 2018 un 35%. De esta corrección, las prestaciones monetarias, fundamentalmente las pensiones, aportan un 70%, el gasto en especie en sanidad y educación un 23%, mientras que la redistribución alcanzada a través del sistema fiscal se limita al 7% restante.

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Ampliación de las figuras de intervención pública consideradas

Esta edición del Informe presenta algunas novedades relevantes, en relación con las anteriores, en cuanto a los instrumentos de intervención pública considerados. Las prestaciones monetarias examinadas son las pensiones públicas de jubilación y de supervivencia, prestaciones y subsidios por desempleo, invalidez, enfermedad y asistencia social y ayudas al estudio, familiares y a la vivienda. La primera novedad es que, además de las prestaciones monetarias, se integran en el Observatorio de manera regular las prestaciones en especie de sanidad y educación.

En cuanto a los impuestos, se analizan las figuras ya incluidas en los Informes precedentes del Observatorio: IRPF, Impuesto sobre el Patrimonio, Cotizaciones Sociales a cargo del trabajador o autónomo, IVA, ITPAJD, Impuestos Especiales sobre el Alcohol y las Bebidas Alcohólicas, sobre Hidrocarburos, sobre las Labores del Tabaco y sobre la Electricidad e Impuesto sobre las Primas de Seguros. Como segunda novedad, se incorpora la imputación del Impuesto sobre Sociedades (IS) y las cuotas empresariales a la Seguridad Social.

Los cambios introducidos permiten al Observatorio ofrecer una fotografía mucho más precisa de la capacidad redistributiva de la intervención pública en España a través de impuestos y prestaciones.

¿Cómo corrige la intervención pública la desigualdad de la renta en 2018?

1º. La intervención pública en forma de impuestos, prestaciones monetarias y en especie ha reducido en algo más de un 35% la desigualdad en la distribución de la renta de mercado de los hogares residentes en España en 2018.

2º. Las prestaciones públicas monetarias son responsables de casi un 70% de esa reducción en la desigualdad. Aunque todas ellas contribuyen a corregir la desigualdad, cerca del 60% de su efecto redistributivo agregado se debe a las pensiones de jubilación y casi un 20%, a las de supervivencia.

3º. Las prestaciones públicas en especie de sanidad y educación explican un 23%, aproximadamente, de la reducción de la desigualdad en la renta de mercado en 2018. El efecto redistributivo del gasto público en sanidad es sensiblemente superior al del gasto público en educación. Para este último gasto, más del 96% del efecto reductor de la desigualdad corresponde a la educación no superior, de tal forma que el gasto en universidad y en el ciclo superior de formación profesional prácticamente no altera la distribución de la renta disponible.

4º. El sistema fiscal es responsable de poco más de un 7% de la reducción de la desigualdad en la distribución de la renta de mercado de los hogares residentes en España. Por lo que respecta a los impuestos directos, el IRPF (muy señaladamente) y el IS tienen un efecto redistributivo positivo, al igual que el conjunto de cotizaciones a la Seguridad Social. Por contra, todos los impuestos indirectos tienen un efecto redistributivo negativo.

Gráfico 1. Corrección de la desigualdad tras la aplicación de impuestos y prestaciones públicas en los hogares españoles en 2018 (variaciones en el índice de Gini)

Fuente: Elaboración propia a partir de la ECV 2019, de la EPF 2018 y estadísticas tributarias de la AEAT para 2018 (ver detalle en el Sexto Informe del Observatorio).

5º. El análisis conjunto de los impuestos y prestaciones muestra que los hogares pertenecientes a los tres primeros quintiles de renta (esto es, el 60% de los hogares residentes con menor renta bruta) son beneficiarios netos de la intervención pública, ya que perciben un subsidio efectivo neto (prestaciones menos impuestos) que es decreciente con la renta bruta: del 90,6% de la renta bruta para el primer quintil, al 17,4% para el tercero. Los hogares situados en los dos siguientes quintiles (es decir, el 40% de los hogares con mayor renta bruta) son contribuyentes netos, ya que soportan un tipo efectivo neto creciente, desde el 4,8% para el cuarto quintil hasta el 25,5% para los centiles 91 a 99 y el 25,2% para el 1% de hogares con mayor renta bruta. Esta caída del tipo efectivo neto para el 1% más rico muestra que el sistema de impuestos y prestaciones en España agota su progresividad en la parte más alta de la distribución de la renta bruta.

Gráfico 2. Distribución conjunta de impuestos y prestaciones en los hogares españoles en 2018 (tipos y subsidios medios en porcentaje de la renta bruta)

Fuente: Elaboración propia a partir de la ECV 2019, de la EPF 2018 y estadísticas tributarias de la AEAT para 2018 (ver detalle en el Sexto Informe del Observatorio).

El impacto monetario de la combinación de prestaciones e impuestos sobre la renta de los hogares españoles en 2018

El impacto monetario sobre la renta de los hogares de la combinación de prestaciones e impuestos puede describirse de forma secuencial, tal como se recoge en la Tabla 1 para 2018. Así, para el hogar español medio, que en 2018 tenía una renta primaria ampliada de 34.246 euros, las prestaciones públicas de carácter monetario elevan su renta en 9.176 euros, de los cuales 6.962 euros correspondieron a pensiones de jubilación y supervivencia, 959 euros a prestaciones y subsidios de desempleo, 821 euros a prestaciones de invalidez y 433 euros al resto. El resultado es una renta bruta media de 43.422 euros que, tras el pago de 12.333 euros en concepto de impuestos directos y 3.417 euros de indirectos, se convierte en una renta disponible de 27.671 euros. Por último, la percepción de prestaciones en especie derivadas del gasto público en sanidad (3.877 euros) y educación (2.343 euros), elevan la renta disponible extendida media a 33.892 euros.

Tabla 1. De la renta de mercado ampliada a la renta disponible extendida, 2018 (media, en euros)

Tramos de renta brutaRenta de mercado ampliadaRenta brutaRenta disponibleRenta disponible extendidaSaldo
Quintil 12.8999.2946.72811.3238.424
Quintil 210.68520.66814.59920.0819.396
Quintil 322.04732.68421.65927.7255.677
Quintil 440.27349.54230.99037.871-2.402
Decil 963.62773.58344.76652.573-11.054
Centil 91-99106.913116.13368.91477.275-29.638
Centil 100308.029317.399219.671227.988-29.638
Total34.24643.42227.67133.892-354
Fuente: Elaboración propia a partir de la ECV 2019, de la EPF 2018 y estadísticas tributarias de la AEAT para 2018 (ver detalle en el Sexto Informe del Observatorio).

Sexto informe del Observatorio sobre el reparto de los impuestos y las prestaciones entre los hogares españoles

López Laborda, J., C. Marín y J. Onrubia (2021). “Observatorio sobre el reparto de los impuestos y las prestaciones entre los hogares españoles. Sexto informe – 2017 y 2018.” FEDEA, Estudios sobre la Economía Española no. 2021‑33. Madrid.

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